El 8 de diciembre, nos dimos cita en nuestro querido Centro Vasco para rendir homenaje a nuestros mayores con la celebración de un almuerzo navideño. Si bien no son los únicos a quienes tenemos mucho que agradecer, sí pudimos hacerlo en persona y entregarles un sencillo recuerdo como muestra de nuestro cariño y agradecimiento por tantos años de dedicación:
MARI DE JAYO
ROSARIO DE IBARRA
BAKARNE DE UZCANGA
JOSÉ LUIS UNAMUNO
CONCHITA DE LIZARAZU
MIRENTXU DE BILBAO
ROSA MARI DE UGALDE
SALVADOR ARANGUREN
MARIBE DE CELAYA
El texto a continuación, recoge lo que en tan especial ocasión quisimos expresarles:
“LAS CASAS SE CONSTRUYEN CON LADRILLO Y CEMENTO; LOS HOGARES CON SUDOR Y AMOR.”
Como le he oído decir a mi ama muchas veces, las casas se construyen con ladrillo y cemento; los hogares con sudor y amor. Nuestro Centro Vasco, que es un poco el hogar de todos ha sido posible gracias a el sudor y el amor que a lo largo de tantos años, inclusive desde antes de su fundación, le han entregado a nuestra institución muchas personas, algunas por un corto período de tiempo, otras por un poco más y las más especiales, aquellas que de manera continua, generosa y desinteresada le han dedicado tantas horas de trabajo y tanto esfuerzo y dedicación, para hacer que tantas cosas buenas y bonitas sucedan.
Los hemos visto hacer gestiones legales, tomar una brocha y pintar, tomar una escoba y barrer, enseñar bailes a las nuevas generaciones, enseñar canciones, organizar eventos de alta envergadura, cocinar, coser y todo aquello que fuese necesario para que cada proyecto planteado llegase a feliz término.
Gracias al cariño y esfuerzo de estas constantes personas hemos podido vivir juntos momentos inolvidables, hemos acumulado anécdotas que nos hacen reír cada vez que las recordamos. Y gracias a ellos y a su dedicación, nuestro pequeño y modesto Centro y la cultura vasca gozan de una muy buena reputación en nuestro entorno; y lo más importante: ha sido posible crear lazos de amistad que la distancia y el tiempo no podrán disolver.
Hoy atravesamos momentos muy difíciles que estamos seguros superaremos. Y gracias al hermoso legado que nos dejan quienes ya no están con nosotros y a quienes felizmente hoy tenemos aquí para agradecerles, seguimos con la ilusión de mantener viva la llama confiados en que vendrán tiempos mejores y que nuestro centro seguirá siendo ese lugar de encuentro donde niños, jóvenes y mayores comparten momentos entrañables. Permítannos hoy hacerles un modesto y sentido reconocimiento. Estamos infinitamente agradecidos por su invaluable aporte. Los queremos mucho.
Eskerrik Asko.
Palabras de Illargi Uzcanga, Presidenta de la Junta Directiva